La paciente buscaba un cambio sutil y natural. Presentaba giba ósea, dorso ligeramente desviado y punta caída, bulbosa y muy proyectada. Tras la cirugía, se definió y desproyectó la punta con rotación suave, se simetrizaron las fosas y se corrigió la desviación del dorso, logrando una nariz natural, elegante y proporcionada. Se muestra resultado tras 1 año.

Paciente con punta muy bulbosa, giba pronunciada, caída nasal con ángulo cerrado y gran desviación del dorso y tabique hacia la izquierda.
Tras la cirugía, la punta quedó más definida y triangular, el dorso centrado y ligeramente curvo, y el ángulo labio-columela más abierto. Resultado tras 1 mes.

La paciente presentaba giba importante, punta caída al sonreír y ángulo nasolabial cerrado. Tras la cirugía, el rostro se dulcificó con líneas dorsales bonitas, sutil rotación de la punta, mejor relación labio-punta y sin caída al sonreír, logrando un cambio elegante y natural.

Carmen presentaba punta muy bulbosa y poco definida, y de perfil, punta caída con giba pronunciada. Tras la cirugía, la punta es definida y triangular, los orificios más anatómicos, el dorso mejorado y la punta levantada, con un resultado natural e inmediata poca inflamación.

Reconstrucción nasal con cartílago costal. La paciente presentaba pérdida del soporte nasal así como punta caída y sin definición, giba y falta de soporte. Hemos recuperado la estética y la funcionalidad nasal, y fortalecido toda su estructura.

Los casos más complejos de rinoplastia son aquellos en los que ya partimos de una nariz bonita. En este caso, nuestra paciente quería suavizar un poco su dorso y elevar la punta. Un cambio sutil pero muy natural y bonito.

La paciente presentaba giba moderada y sin transición dorso-punta, más evidente en vista de tres cuartos.Tras la cirugía, se mejoró el dorso, se mantuvo el ángulo labio-punta y se definió la transición, eliminando la giba en esa vista.

La paciente presentaba gran giba y punta caída y poco definida. Se redujo la giba, logrando un dorso elegante, y se elevó y definió la punta, obteniendo un resultado natural y acorde a sus rasgos.

Conseguimos un resultado natural y armónico con las proporciones faciales de la paciente mediante la rinoplastia ultrasónica.

La paciente presentaba piel gruesa, giba moderada, sin transición dorso-punta y punta ligeramente caída. Tras la cirugía, se feminizó el dorso, mejoró la transición y se rotó mínimamente la punta para mantener naturalidad, con un resultado bonito.

La paciente quería un dorso recto, punta más definida y no muy levantada, además de mejorar su respiración afectada por desviación del tabique. Se redujo la giba para un dorso natural, se levantó y definió la punta sutilmente y se realizó septoplastia con radiofrecuencia de cornetes.

Andrés presentaba columela colgante, retracción alar, espina nasal anterior prominente, punta caída y giba importante, queriendo un cambio natural. Tras la cirugía, se dejó un dorso recto y masculino, se levantó discretamente la punta y se redujo la espina nasal, mejorando ángulo nasolabial y columela.